
02 Jun Justo Navarro y la novela de espionaje, idilio noir perfecto
Ya lleva un tiempo en las librerías pero no envejecerá nunca. ‘Petit Paris’ es una novela de personajes que parecen salidos de una película de Melville. Todos se te aparecen con una claridad que no rima literalmente con el noir, pero que es pura novela de espionaje. La nueva entrega de Justo Navarro para Anagrama tiene todos los ingredientes para gustar a propios y extraños a su literatura pues hay esa difusión tan evidente del bien y el mal en tiempos convulsos como principal seña de identidad, que tanto atrae del género, y hay una literatura ágil pero precisa, ardiente pero de a poco, con la intriga siempre en la siguiente página.
Como es de esperar hay una femme fatale, un antihéroe, varios crímenes, escenarios con trenes de fondo, sombreros, gabardinas, muchas marcas de tabaco, contrabando, robos y altas dosis de barra de bar con soplones en guardia. Un escenario minuciosamente estudiado por el autor granadino afincado en Nerja. El gran acierto es colocar a dos policías de la grisácea catetez del franquismo y que no desentonen en el París ocupado de la Segunda Guerra Mundial. En una ciudad majestuosa donde todo el mundo está a punto de cambiar de bando, todo puede estallar.
Identidades dobles como la del más buscado del libro y los silencios del detective que va atando cabos sin hacérselos saber al lector, con una maestría genial redondean un libro apto para degustadores del cine negro, de la novela de policías heredera de Hammet y Chandler y quizá un poco de Calvalho y Montalbano. Por esa solitaria condición asocial del detective de marras.
Personalmente he descubierto a un autor capaz de hilar una trama compleja pero mantener los tiempos de la narración con la tensión necesaria para que no decaiga. Un perfecto descriptor de personajes en los límites, que abundan en silencios y en rumiar historias inconfesables que les han obligado a no esperar nada de nadie y actuar a veces por convicciones y otras por bemoles. Una buena precuela de ‘Gran Granada’.
Muy recomendable.
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